Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de mayo, 2016

Contra las cuerdas

Momento del encuentro en la AN La gran mayoría de los venezolanos quiere un cambio pacífico que permita dejar atrás la crisis social y económica que padecemos todos. Luego de 17 años de una política marcada por la polarización y la recurrente violencia política es normal que el deseo de cambio venga acompañado de un legítimo y profundo deseo de paz. Por ende, es natural que las iniciativas de diálogo gocen inmediatamente de una buena acogida. La base social de un proceso de diálogo es amplia, extensa e intensamente distribuida entre los venezolanos. Pero, ¿todo diálogo es posible? ¿Es políticamente aceptable cualquier tipo de diálogo? Esta es una pregunta más compleja y sobre ella nos toca pensar. El chavismo y el diálogo MBR200: una secta militar antidemocrática La secta militar, de cuyo núcleo brotó lo que después se conoció como chavismo, apareció en 1983 para conspirar contra la democracia venezolana. El 4 de febrero de 1992 los venezolanos conocimos al chavismo, e

Reflexionando 23 años después

Hace 23 años el sistema expulsó a CAP de la Presidencia El 21 de mayo de 1993 Carlos Andrés Pérez renuncia a la Presidencia de la República de Venezuela. Esta fecha no solo representó el cierre de un mandato accidentado sino también el fin de un experimento de reformas institucionales de amplio alcance que quedó truncado a la mitad de su desarrollo. Carlos Andrés Pérez, El Gocho , político de Acción Democrática, con una dilatada trayectoria, que gobernó Venezuela entre 1974 y 1979, había sido electo en diciembre de 1988 con mayoría absoluta de votos, 3.879.024 sufragios, derrotando a Eduardo Fernández, El Tigre , de COPEI, a Teodoro Petkoff, del MAS, y a otros candidatos. El 2 de febrero de 1989 había asumido por segunda vez en su vida la Presidencia de Venezuela. Desde que el Viernes Negro, el 18 de febrero de 1983, se inició la devaluación del bolívar y se estableció un régimen de cambio diferencial, los venezolanos se habían venido empobreciendo, la crisis se había

Navegar entre escollos: anomia, deriva autoritaria y transición a la democracia

La cotidianidad trastornada El hombre es un animal de costumbres, de hábitos, de recurrentes conductas aprendidas socialmente. Así se van formando instituciones sociales que hemos dado por sentadas. La vida cotidiana se sostiene a través de estos hábitos heredados, de generación en generación, que se transfieren de madres a hijos, de abuelas a nietas. Esto conformó un tejido social, una red que se había venido sosteniendo fundamentalmente por la existencia de un conjunto de certezas, de una confianza fundamental en lo previsible. En Venezuela toda esta estructura de relaciones, de vínculos, se ha venido deshilachando, se ha roto la confianza, la incertidumbre y el miedo han enseñoreado la cotidianidad hasta marcar una peligrosa forma de disolución: el reino del “sálvese quien pueda”. En segundo término está el Estado, una estructura de poder, una manera de entender el orden, de configurar los patrones políticos, el principio de autoridad y su legitimidad, los patrones económic